Cada vez se reafirma que el juego es la mejor forma de potencializar las habilidades en los niños y las niñas; por esta razón, empleamos el juego de roles como una de las estrategias para fortalecer en ellos la fuerza, el tono, el agarre, pero especialmente la coordinación viso motriz que se requiere para desarrollar todas las actividades de la vida cotidiana y académica.
Los niños encuentran en este tipo de actividades o juegos la mejor forma de compartir, solucionar pequeñas dificultades y de sentir que cada vez son más grandes y pueden hacer muchas cosas por su cuenta.