Los pequeños de K1 se sumergieron en la mágica selva amazónica, convertidos en valientes cazadores de mosquitos. Vivieron una aventura llena de sonidos, juegos y descubrimientos. Exploraron cada rincón imitando movimientos, escuchando atentamente los murmullos de la naturaleza y fortaleciendo su cuerpo con saltos, giros y carreras. A través del juego, desarrollaron el equilibrio y el tono muscular, mientras disfrutaban de una experiencia cargada de imaginación, risas y movimiento.